La piedra de alumbre, un desodorante natural

Todos estamos de acuerdo en que el uso del desodorante es fundamental en la higiene personal. Muchas veces, debido a sus componentes químicos, estos productos pueden provocar irritaciones en las pieles sensibles. Tanto si es tu caso como si no, la piedra de alumbre es una alternativa natural a los clásicos desodorantes que podemos comprar en los supermercados.

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El mineral de alumbre es de origen volcánico y se encuentra en la naturaleza en forma de sal cristalizada. En la antigüedad ya lo utilizaban para controlar el olor corporal y era muy apreciado por su poder antibacteriano y cicatrizante. En la actualidad, muchos desodorantes incluyen entre sus componentes este mineral. Sin embargo, también podemos encontrarlo en su forma natural. Pero tranquilos, que seguro que os estaréis imaginando un pedrusco. Se comercializa pulido o en forma de stick con tapa para que pueda utilizarse cómodamente. 

No contiene ningún componente químico, es invisible, no mancha ni irrita la piel y tampoco tiene olor. Y además sale bastante económico porque dura muchísimo (más de un año). Para aplicarlo solo hay que humedecer la piedra con agua y frotarlo contra la piel durante unos cinco o diez segundos.

Gracias a su efecto calmante y cicatrizante puede utilizarse después del afeitado y la depilación. Como desodorante, además de en las axilas, puede resultar eficaz en otras zonas como los pies, etc. Es recomendable para pieles sensibles con tendencia a irritarse y ante pequeños cortes como los que pueden resultar de la depilación o el afeitado (no obstante, si tenemos problemas en nuestra piel, de irritaciones o de cualquier otro tipo, lo adecuado es consultarlo con el médico). También puede ayudar en casos de acné. Además de su poder antiséptico, algunos también destacan un efecto reafirmante.

Los desodorantes convencionales dificultan la transpiración y enmascaran el olor con perfumes, sin embargo el mineral de alumbre crea una capa en la piel que evita la formación de las bacterias que provocan el mal olor.

Lo podéis encontrar en herbolarios y establecimientos de cosmética natural por unos 8 euros.

Gana peso de forma saludable

Si lo que queremos es perder peso, podemos encontrar sin problema infinidad de artículos y dietas que nos guían, mejor o peor, a la hora de deshacernos de esos kilos de más. Pero muchas veces nos olvidamos de las personas que lo que necesitan no es perder sino ganar algo de peso.

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La clave está en adquirir una serie de hábitos en nuestra alimentación que nos permitan conseguir aumentar de peso de forma saludable. Lo ideal es alcanzar una proporción correcta entre masa muscular y grasa en nuestro organismo. No vale engordar de forma descontrolada y atiborrarse a bollería industrial y bocadillos de chorizo.

Como cada caso es diferente, lo conveniente sería consultarlo con tu médico o con un nutricionista para que te haga un seguimiento personalizado, te asesore y así asegurarte de hacerlo adecuadamente.

No obstante, hay una serie de consejos que pueden servirte de ayuda.

Uno de ellos es comer pequeñas cantidades con bastante frecuencia. De esta forma conseguirás aumentar las calorías que ingieres sin llegar a sentirte totalmente saciado en una sola comida.

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El objetivo es aumentar de peso y ganar salud a la vez. Por ello, debes olvidarte de los fritos y las grasas saturadas en general. Ya que de esta forma harás que tus niveles de colesterol se pongan por las nubes.  Opta por concentrar en tus platos calorías saludables. Lo importante es la calidad, no la cantidad de lo que comes.

Una opción muy acertada es añadir huevo a cremas, purés, caldos u otras preparaciones. No estaría mal de vez en cuando recurrir a la pasta rellena. Elige carnes que sean magras. También puedes complementar tus batidos de frutas con miel, leche, cereales y frutos secos. Lo mismo ocurre con el yogur, que admite gran variedad de ingredientes a nuestro gusto. Además de los frutos secos, no te olvides de otros aperitivos como las aceitunas. Relájate después de las comidas. Y si te apetece, come algo antes de ir a dormir.

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Estos hábitos en tu dieta deben ir acompañados de ejercicio físico de forma regular para aumentar y fortalecer tu musculatura.

A muchas personas les resulta difícil ganar peso. El origen puede estar relacionado con la genética, la falta de apetito o el metabolismo. Aunque también puede deberse a enfermedades, depresiones, estrés, etc.

Al igual que en las dietas de adelgazamiento, los objetivos no se alcanzan de un día para otro. Busca apoyo en tu familia y amigos y márcate metas alcanzables. Lo ideal para ganar o perder peso es hacerlo de forma gradual. De esta forma, los hábitos saludables que hayamos adquirido se afianzarán y aumentará nuestro nivel de bienestar.